Nos
levantamos temprano. Hubo cortocircuito interno, me sentí muy incómoda. Sofi y
yo salimos a dar una vuelta antes de ir a la casa de los padres de Xxxxx a
almorzar. Él es una persona difícil.
Todavía no sé
bien cuántos días me quedo en Munich, por las dudas cambié mi pasaje para
volver a Madrid para el 22. Ya no sé si me conviene volver a Madrid. Me da pena
porque querría pasar más días con Ro. Mi plan inicial era venir a Munich desde
Madrid el 24, y el primero de octubre ir a Praga. El 8 ir a Berlín, y después a
Hannover. Bueno, no sé qué voy a hacer ahora. Por suerte mis planes siempre son
modificables. A lo sumo, compraré serenidad por 500 euros. No es nada caro. Hablé
con Rosario, me dice que nos vayamos a Madrid, que nos quedemos en la casa que
tiene en el pueblo vecino, que le avise, que llena la despensa y la heladera.Ro es única.
Los padres de Xxxx son un encanto, y también el hermano, y su mujer y su hija, y el sobrino,
que fue a conocer a Bastian. Almorzamos con ellos, la mamá preparó comida
típica alemana, muy rica, una carne con salsa cremosa y splaztle, ensalada, y
otro plato con carne del que no recuerdo el nombre. Pasamos un día tranquilo, viven
en un lugar muy agradable, de casas de techos a dos aguas, con jardines muy cuidados.
Salimos a caminar por los alrededores y vimos unos preciosos lugares que son
como pequeños jardincitos con una casita de madera, cada predio pegado al
siguiente. Forman una especie de sendero enjardinado, y los dueños son gente
que vive en apartamentos, y tienen esos espacios para ir los fines de semana,
tener una huerta, flores, árboles.
Me encantó
Munich, y eso que todavía no vi nada. Me gustaría ir al Englischer Garten, al
centro histórico, al río Isar, a ver castillos.
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