15 de setiembre de 2014, lunes.

Me levanté y me decidí a volver a Montevideo. No estoy pasando nada bien, con mi madre internada, Bastian enfermito y Sofi de bajón. Sofía se quiere volver, no se lleva bien con Xxxx, aunque quiere que Bastian conozca a su familia y tenga vínculos afectivos con ellos, que son un encanto de personas. La situación no se sostiene.

Llamé a la aerolínea, cambié los pasajes, 200 euros más. No me importa. Creo que fue una buena decisión. El miércoles salimos hacia Montevideo, llegamos el jueves. La decisión nos dejó felices a ambas. Si Bastian se diera cuenta, también estaría feliz.

Pienso en pelotudeces, como que me dejé las sandalias y el vestido negro en lo de Ro, los pantalones negros que más me gustan, etc. No pienses en lo que no tenés, pensá en lo que te sobra, diría Ro. Es un pensamiento perfecto. Tengo que llegar a Montevideo y tirar un montón de cosas.